En mis últimos años como jugador de rugby, había nacido en mi la intima convicción de entrenar. Para ello, sabia que el punto de partida para desempeñarme correctamente y ser consecuente con el esfuerzo de los jugadores era nada menos que prepararme.-

Contrariamente a la conducta que muchos entrenadores profesionales de fútbol realizan hoy, resultaba lógico que primero debía leer, informarme y estudiar el juego, para luego asumir la responsabilidad de entrenar.
No se trataba simplemente de transmitir mis experiencias como jugador, sino que ingresaba en un campo mucho más complejo y apasionante, donde el conocimiento y entendimiento del juego era uno de los pilares fundamentales.
Pero ese entusiasmo y esa convicción de estudiar y aprender el juego del rugby, tropezaba a mi entender con un obstáculo importante: el escaso material didáctico con que contaba.

Si bien grandes conocedores y estudiosos del juego han dejado su impronta en algunos libros de rugby, entendía que la mayoría de esas obras no acentuaban de manera clara lo principal e importante del juego por sobre lo accesorio y por ende no contaban con la claridad conceptual que pretendía para explicar un deporte tan complejo de la manera más simple y sencilla.
 
En definitiva, existía -y existe- a mi juicio un marcado déficit en ese sentido por lo que es mi deseo hacer con el presente trabajo una pequeña contribución al juego.-

Muchos afirman con acierto que después del juego del ajedrez es el deporte con mas combinaciones posibles. Además, la cantidad de jugadores por equipo no tiene parangón en otro deporte, lo que lo hace más complejo e interesante aún.-

El rugby es un deporte extremadamente complejo, donde existen infinidad de combinaciones que se traducen en distintas situaciones de juego como pasar la pelota, correr, apoyar, empujar, ruckear, patear y saltar por ejemplo.

Todos aquellos que tienen la tarea de enseñar este deporte tienen “la obligación” de apuntar a simplificar este juego como punto de partida para que sea aprendido de la manera más clara y didáctica posible.

Cliff Jones, destacado entrenador galés decía que “reducir las complejidades del juego a simplicidades es el propósito de un buen entrenador.” Por su parte, Ray Williams en su Libro “Rugby actual” se manifiesta en igual sentido expresando que “nuestro lema debe ser el éxito a través de la simplicidad.”

Los australianos, verdaderos estudiosos del deporte y del rugby en particular, dicen que uno de los secretos del juego es “hacer las cosas simples bien y las complejas tratar de hacerlas simples”.
De eso se trata. De darle a quien lo practica un camino claro que transitar y no deambular por conceptos ambiguos que lo único que hacen es confundir.
De nada sirve practicar técnica de patada sino sabemos cuando y porque debe patearse. De poco sirve pasar la pelota sistemáticamente si no entendemos claramente cual es el concepto del pase y su objetivo cada vez que un equipo se hace de la pelota...

                                                  II

Desde muy pequeño me enseñaron el rugby de una manera muy ortodoxa y tradicional.
Era una época donde los jugadores no ponían en duda las teorías ni los métodos de enseñanza ejecutados por sus entrenadores sino tan solo se dedicaban a escuchar.
Lo que decía el entrenador, era considerado como una verdad absoluta y nadie, bajo ninguna circunstancia, podía ponerlo en duda ya que representaba, en ultima instancia, un síntoma de rebeldía y en cierta manera una descortesía.
Así, bajo ese antiguo sistema de enseñanza fui aprendiendo las destrezas básicas del rugby. Pasar la pelota, patear o empujar eran destrezas que se practicaban sin que los jugadores supieran ni mas remotamente porque y para que se debían realizar.

Hoy, mas de veinte años después, esa realidad ha cambiado sustancialmente.
Mi primera experiencia con entrenador me permitió comprobar aquello que sospechaba desde hace tiempo. Las nuevas generaciones de jóvenes que todo creen saber y todo lo preguntan, plantean cuestionamientos a cada instante y están deseosos de saber los motivos o razones de aquello que transmitimos.
Es decir, asistimos a una nueva generación de jugadores que ponen en duda absolutamente todo.
Ellos necesitan imperiosamente saber porque se realizan ciertas cosas y para que se hacen, es decir encontrarles un sentido.-
Explicándoles esos interrogantes, los jugadores estarán convencidos y decididos a ejecutar en la cancha aquello que realizan en la practicas.
El australiano Rod Mcqueen, ex entrenador de los Wallabies y verdadero referente de este deporte decía hace varios años que “siempre debemos preguntarnos porque”.
Imitar al ilustre australiano nos permitirá comprobar si hemos acertado o nos hemos equivocado y además enderezar el rumbo si entendemos se ha desviado.
Por otra parte, ello exige, a quienes tenemos el privilegio de entrenar, prepararnos debidamente, para estar en condiciones de dar respuestas a los requerimientos de los jugadores.-

                                              III

Este trabajo consta de tres capitulos.

El primer capítulo denominado objetivos del juego del rugby se divide en tres partes.
La primera parte obtener la posesion enuncia y analiza los instrumentos necesarios para lograr hacerse de la pelota, ya sea en el inicio del juego o a través de la recuperación, como punto de partida para desandar el camino para marcar puntos.-
La segunda parte mantener la posesion enumera y analiza las destrezas básicas que debe aprender y perfeccionar todo jugador para que el equipo logre conservar la pelota una vez obtenida.-
Y la tercera y última parte conservar la posesion hasta marcar puntos desmenuza los presupuestos necesarios para traducir la conservación de la pelota en puntos para el equipo, basándose en los principios de continuidad e ir hacia delante.-
Es indudable que si el jugador conoce el objetivo del juego y además los modos o formas de alcanzarlo, ello le dará el convencimiento que necesita para dirigir su energía en la dirección adecuada.-

El segundo capitulo el juego mental, analiza la importancia del aspecto anímico y su incidencia sobre los demás aspectos del juego.-
Se enumeran y explican en forma sintética las distintas habilidades mentales y asimismo remarca la importancia del entrenamiento mental o visualización y la respuesta del deportista ante situaciones de presión.-
Por último, se acentúa el verdadero desafío que debe trazarse todo deportista, que no es otro que el de prevalecer en la competencia con un mismo.-
 
El tercer y último capitulo el juego de backs analiza todo lo relacionado y vinculado con el juego de tres cuartos.
Se explica de un modo genérico el objetivo que persigue todo equipo en cada apertura a la línea de backs y los modos o formas de alcanzarlo. Se enuncian los presupuestos o condiciones para que siete tres cuartos formen o representen a una verdadera línea de backs y a su vez desmenuza aspectos técnicos y tácticos como ser la forma de alineamiento, la dirección del pase y la velocidad de carrera, como así también la toma de decisiones. Por último, enumera sintéticamente algunas conclusiones expuestas de manera sencilla.-

                                                IV

Explicar el rugby de una manera didáctica es el objetivo. Simplificar un deporte absolutamente complejo y darle el sentido que a veces se pierde acentuando conceptos poco claros o rebuscados que lejos de ayudar, muchas veces confunden y no conducen a nada.- Aquí les presento RUGBY DIDÁCTICO, que es mi deseo puedan disfrutar...